Cruz Azul sigue trabajando sin descanso por renovar su plantilla para el Torneo Apertura 2023, donde espera recuperar el protagonismo de la mano de Ricardo Ferretti y pelear por el título de la Liga MX.

Sin embargo, el mercado de la Máquina no ha estado a salvo de polémicas, como sucedió con los casos de Matheus Doria y Eduardo Aguirre, quienes finalmente no se convertirán en refuerzos de Cruz Azul.

Desde los Cementeros argumentaron que los traspasos no se concretaron por problemas físicos de los jugadores de Santos Laguna, quienes negaron en todo momento sufrir una lesión de gravedad.

“Nosotros estuvimos encerrados en el hotel 2 o 3 días sin información. Pero nos vemos en la jornada 4, allí vamos a ver quién está lesionado y quién no, dijo Doria tras caerse su fichaje con la Máquina.

Lo mismo sucedió con Aguirre, quien asegura estar en perfectas condiciones. “Solo quiero recalcar que gracias a Dios estoy al 100. No padezco de nada y a lo que toca, entrenar y estar al 100 para la pretemporada e inicio de temporada“.

Al margen del estado físico de los jugadores, los recientes movimientos de Cruz Azul apuntan a que los motivos del fracaso de estos fichajes respondería a motivos que van mucho más allá de lo que se ha dicho.

Y es que la Máquina se ha fijado en dos delanteros que vienen de serias lesiones que sin duda representarían un riesgo importante para el futuro, como es el caso de Diber Cambindo y Alan Pulido.

¿Qué lesión tenía Cambindo?

Foto: Imago

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El colombiano padecía contusión ósea en el pie izquierdo, razón por la que jugó infiltrado en sus últimos partidos con el Deportivo Independiente de Medellín, pero esto no parece preocupar a Cruz Azul.

¿Y Alan Pulido?

Foto: Imago

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El mexicano ha rendido a un buen nivel con el Sporting Kansas City, pero hay que recordar que viene de una grave lesión en la rodilla que lo apartó de los campos de juego por más de un año; sin embargo, la Máquina igual evalúa su fichaje.