Pese a no haber tenido un pasaje muy significativo en La Máquina,en las temporadas 1987-88 y 1988-89 Jaime Ordiales, nuevo Director Deportivo de Cruz Azul, vistió la playera celeste siendo uno de los jugadores con mayor proyección del momento.
Pese a haber tenido un gran control del balón y una importante estatura, las lesiones impidieron que el ahora dirigente del club pudiese tener una mejor época en el equipo, aunque en la primera campaña logró tener varios partidos como titular.
Para la temporada 1988-1989, el jugador tuvo muchos inconvenientes físicos que hicieron que, de a poco, perdiera espacio en el equipo y aunque fue subcampeón, no participó en la Liguilla.
Se fue a Chivas de Guadalajara en la temporada 1989-1990 dejando una marca de11 goles, distribuídos en ocho por Liga MX y otros tres por Copa MX.
Ahora, en labores institucionales, Ordiales vuelve a lo que alguna vez fue su casa en búsqueda de rescatar al equipo de un mal momento deportivo y volverlo a colocar en el alto peldaño que merece.