Fue hace dos meses cuando las noticias remecieron a todo Cruz Azul: Guillermo Álvarez, presidente del club de futbol y director general de la Cooperativa, junto a su hermano Alfredo y su cuñado Víctor Garcés, eran investigados por la Unidad de Inteligencia Financiera por malversación de fondos, lavado de dinero e inteligencia organizado.
Muchos antecedentes se han sumado a las investigaciones durante los últimos sesenta días, y varias han sido las manifestaciones públicas en contra de Billy por parte del grupo de cooperativistas disidentes, quienes lo acusan de más delitos y aseguran que sigue defraudando, no solo a la cementera, sino también al equipo.
Sin embargo, esta mañana más de 200 personas entre socios cooperativistas, trabajadores y familiares de cementeros se manifestaron con pancartas y mantas en apoyo al mandamás de Cruz Azul en el zócalo en frente al Palacio Nacional. Todos con sus tapabocas y respetando la distancia social.
Jorge Hernández, vocero de la Cooperativa, explicó en plática con Récord que “lo que venimos a hacer es externar el cansancio por parte de los cooperativistas verídicos sobre los actos y la manipulación mediática y de juicios que un grupo de socios suspendidos, encabezados por José Antonio Marín, Víctor Manuel Velázquez, entre otros, han llevado a cabo para alterar la paz social y poner en riesgo el patrimonio de los más de 700 socios en activo y las más de 7500 familias que dependen de Cooperativa La Cruz Azul”.
De momento siguen las investigaciones en contra del actual mandamás cementero y es de esperar que con la intervención de la DEA, en Estados Unidos, todo tenga una pronta resolución.
