Cruz Azul se ha caracterizado por tener grandes planteles a lo largo de su historia. Figuras de probado talento se han mezclado con soltura junto a jóvenes promesas y han sabido conformar vestidores de época, aunque no hayan coronado con título. No obstante, son pocos los que logran penetrar en la afición cementera y dejar una huella tan profunda como lo hizo César Delgado.
El atacante argentino que llegara en 2003 desde Rosario Central ha sido uno de los grandes referentes en las últimas décadas, e incluso ha sido reconocido como un fuera de serie por ex compañeros o entrenadores que lo tuvieron a cargo. Casi cinco fueron los años en los que el Chelito desplegó su magia con la playera cementera, antes de que Sergio Markarián lo incluyera en el recambio del equipo rumbo al Clausura 2008.

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De allí pasó al fútbol de Europa para defender los colores del Olympique de Lyon, luego tuvo un regreso a México con los Rayados de Monterrey, donde consiguió la gloria internacional en la Concacaf Champions Cup y finalmente regreso a Argentina para retirarse en su querido Canalla. No obstante, el equipo al que más cariño le guarda es a La Máquina Cementera.

César Delgado caló hondo en la afición de Cruz Azul Azul (Getty Images)
“La pasamos bárbaro en México realmente. Mi vida esos 4 años y medio fueron intensos, maravilloso por lo que viví con el Cruz Azul, porque me tocó estar en la Selección Argentina, me tocaron los Juegos Olímpicos, Copa América, Copa Confederaciones, Eliminatorias”, comentó en primera instancia en el podcast del Monstruo Azul.
“Todo eso que viví me lo dio México, porque me dio una vidriera muy importante para mostrarme para estar en Selección Argentina, cosa que no se daba con futbolistas que estuvieran en el fútbol mexicano, así que soy un agradecido”, sostuvo más adelante, remarcando los llamados que recibió desde la selección gracias a La Máquina.
¿Fue Cruz Azul el mejor momento en la carrera de César Delgado?
Ante la consulta sobre el mejor momento futbolístico de su carrera, el Chelito respondió sin un atisbo de dudas que “fue ahí en Cruz Azul, en esos 4 años y medio“. “Porque jugaba de la misma forma y que acá en Rosario, de la misma forma que me fui de acá. Después, en la Selección Argentina jugaba diferente, jugaba de extremo, el clásico extremo como se juega al día de hoy con Marcelo Bielsa. Fue una etapa maravillosa de mi carrera en Cruz Azul”, explicó.