Cualquier conocedor de la filmografía de Will Smith o fanático del cine de acción recuerda a Frank el perro, un alienígena disfrazado de pug en la película Hombres de Negro. Con cara de pocos amigos y una voz más gruesa que la de Alejandro Fernández, Frank explica durante todo el film que la galaxia no es más que una fuente de energía masiva alojada en una joya.
La elección de un pug para este personaje no es casual. En los últimos años esta raza de perros se ha convertido en la favorita para los amantes de los caninos, y su aspecto adorable de ojos grandes no hace más que reforzar esta idea para los que desean tener una mascota junto a ellos. En Cruz Azul los pug también están presentes. Andrés Gudiño presume de Bruno, al que considera su “mejor amigo” y que le ha hecho muy feliz en casa desde que lo adoptó.
“Aquí les presento a Bruno. Es nuestro cachorrito. Tiene 7 años, y el estaba con otra familia que no tenía el tiempo necesario para sus cuidados, entonces nosotros lo adoptamos y ahora le estamos dando mucho amor en casa. ¡Los invitamos a que adopten, como nosotros, y así puedan hacer a muchos perritos muy felices!”, dice Gudiño en una publicación que realizó Cruz Azul por el Día del Perro el pasado 21 de julio.
Gudiño explica muy bien que adoptó a Bruno porque su familia anterior no tenía el tiempo suficiente para sus cuidados. Los pug son una raza de perros que necesitan atención constante debido a la fragilidad de su salud. “Son perros que necesitan muchos cuidados. Incluso más que un niño chiquito. Sufren mucho desde que nacen y necesitan una familia que disponga de tiempo y dinero para poder atenderlos como se requiere”, explica para Vamos Azul la veterinaria Fernanda Ferreira, profesora de veterinaria en la Universidad de Buenos Aires.
¿Por qué son tan adorables los pug como el de Andrés Gudiño?
De acuerdo a una investigación del Real Colegio Veterinario de Reino Unido, la nariz corta de los pug, más su cuerpo y cabeza grande, “puede despertar emociones positivas al adaptarse a la configuración facial del ‘esquema de un bebé’, lo que desencadena respuestas de crianza innatas en los humanos”. Sin embargo, no todo es color de rosas. Tal como explicó Gudiño en la publicación de Cruz Azul y reafirmó la veterinaria Ferreira, se requiere de tiempo para sus cuidados por lo frágil que resulta su estado.
La veterinaria Ferreira nos explicó que los pug son una raza de perros que no recomienda para los que se inician en el mundo de las mascotas. Uno de los problemas más graves a los que se enfrentan los pug son al síndrome de obstrucción de las vías respiratorias braquicefálicas. Traduciendo: debido a su hocico corto, característica que los hace atractivos para los humanos, los pug sufren frecuentemente de dificultades para respirar. Además, y por el pelo del pliegue nasal, también son propensos a sufrir de ulceraciones o lesiones en la córnea.
Otro problema al que se enfrentan es la obesidad y la poca tolerancia al calor. Myfanwy Hill, veterinaria de la Universidad de Cambridge, graficó con una acción común el sufrimiento que padecen los pug. “tratan de respirar como si lo hicieran través de una pajilla realmente estrecha”. Por suerte para Bruno, cuenta con un Andrés Gudiño que se ha convertido en su ángel guardián.