En los últimos años, varios exjugadores ligados a Cruz Azul (incluidos integrantes del histórico plantel campeón de 1997) han encontrado caminos de crecimiento dentro y fuera de México, ya sea en los banquillos, en oficinas deportivas o en proyectos internacionales. En ese mapa de talento cementero que se expande, una figura mexicana destaca hoy desde uno de los escenarios más competitivos del mundo: LaLiga de España.
El directivo que hoy se afianza en Europa es Marco Garcés, mediocampista surgido en la cantera celeste y campeón con La Máquina en el Invierno 1997. Su relación siempre tuvo matices: cumplió el sueño de coronarse con el equipo donde debutó, pero sabía que la final ante León sería su último partido como celeste. “La final contra León fue una mezcla de sentimientos… yo ya sabía que después de ese partido salía del club”, confesó en su momento.

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Tras su salida, su carrera en México se fortaleció con pasos por Tecos, Guadalajara y Pachuca, donde levantó más títulos y se consolidó como un mediocampista eficaz, inteligente y con gran lectura del juego. El primero de esos llegó precisamente contra Cruz Azul, en el Invierno 1999. Aquella noche marcó un contraste potente en su historia: Garcés levantaba otro título, pero del lado rival.

Marco Garcés tuvo un segundo paso por Cruz Azul entre 2004 y 2005, antes de retirarse (JAMMEDIA)
Fue fuera de la cancha donde Garcés dio el salto definitivo. Su formación lo llevó a trabajar en academias y estructuras deportivas del Liverpool y del Manchester United, enfocado en detección y desarrollo de talento. Más tarde, se convirtió en director deportivo del Pachuca, con el que ganó una Liga MX, una Concachampions y alcanzó el tercer lugar en el Mundial de Clubes (una de las mejores etapas institucionales en su historia).
En 2022 se unió a LAFC, donde jugó un rol clave en fichajes estratégicos como el de Gareth Bale y convivió con Mateusz Bogusz, hoy figura de Cruz Azul, lo que terminó de posicionarlo como uno de los directivos mexicanos con experiencia más rica a nivel global.
Marco Garcés se afianza en España: renovó por 4 años
El Celta de Vigo confirmó la renovación de contrato de su director de Fútbol hasta junio de 2030, una apuesta rotunda por la estabilidad y por un proyecto deportivo que, según el club, ha acelerado procesos, reorganizado áreas internas y colocado a A Canteira (la cantera celeste) en el centro de la planificación.
En su comunicado, el club español destacó que el directivo mexicano ha impulsado una transformación profunda: “El trabajo coordinado entre áreas ha permitido avanzar notablemente en apenas dos temporadas, favoreciendo la proyección del talento en todos los niveles”, expresó el Celta en su mensaje oficial.
Además, subrayó su integración cultural, destacando su compromiso por conocer la historia, las raíces y la tradición gallega desde su llegada. Con este nuevo acuerdo, el club busca consolidar una estructura sólida y ambiciosa que sostenga el crecimiento deportivo de los próximos años.
El impulso de Garcés en fuerzas básicas, en contraste con Cruz Azul
El contraste con Cruz Azul es inevitable. Mientras La Máquina sigue pendiente de consolidar de forma consistente a sus canteranos y cada vez son menos las oportunidades para jóvenes promesas de La Noria, en Vigo el avance ha sido tangible: juveniles que ascienden al Celta Fortuna, procesos acelerados y varios debuts en LaLiga bajo su gestión.
¿Cómo fue el paso de Marco Garcés por Cruz Azul?
Al final, la historia de Garcés con Cruz Azul también se sostiene en números: entre 1994 y 1997 y luego en su segundo ciclo (2004-2005) disputó 50 partidos oficiales con la camiseta celeste y marcó 3 goles. Para muchos aficionados, quedó la sensación de que su etapa pudo ser más larga, pero hoy su crecimiento internacional demuestra que aquel joven mediocampista del ’97 estaba destinado a un camino mucho más amplio.





