La llegada de José Joaquín Martínez a Cruz Azul generó tanto recelos como altas expectativas: jugador contrastado en la Liga MX, su experiencia serviría como timón para ayudar a dirigir a una plantilla que reúne a futbolistas que se vienen abriendo paso y otros con suficiente jerarquía para romper el cepo de títulos de La Máquina que tiene más de 20 años en blanco.

 

Sin embargo, y a varios meses de su llegada, la contratación del ‘Shaggy’ Martínez está resultando más anecdótica y pintoresca que productiva y efectiva. Su participación se ha limitado a los minutos ‘basura’ en la Copa por México, término que acuñaron los relatores al tiempo que pasa cuando un encuentro ya está definido y en vísperas de su final.

Shaggy Martínez en los entrenamientos (Cruz Azul)

Shaggy Martínez en los entrenamientos (Cruz Azul)

Su opacidad tiene nombre propio: Juan Escobar. Y es que el lateral paraguayo está teniendo un inicio de temporada para enmarcar. El futbolista de 25 años se ha adueñado de la banda derecha de Cruz Azul y pareciera que no la quiere soltar. En su última presentación del fin de semana, se estrenó como goleador en este Guard1anes 2020 y la Liga MX lo incluyó en el Mejor Equipo de la Semana.

El nacido en Luque (Paraguay) está cumpliendo su segundo año defendiendo la playera celeste, y desde su arribo, son pocos los que han tenido la oportunidad de disputarle la titularidad. Para Robert Dante Siboldi, el paraguayo está resultando una garantía en defensa y una sorpresa en ataque.

 

 

En sus 26 encuentros anteriores con el equipo, Escobar solo había marcado en dos ocasiones. Ahora, en este Guard1anes 2020, sumando a sus participaciones en la Copa por México, ya ha igualado su récord de goles anterior. Con 262 minutos jugados de 270 posibles, pareciera complicado que el Shaggy pueda disponer de juego salvo alguna eventualidad… y para llover sobre mojado, sin público en las gradas, tampoco puede ver a su amigo fiel que lo acompañaba a todos los campos.