El futbol es un deporte en el que todos los jugadores están expuestos a las equivocaciones, sobre todo en un equipo como Cruz Azul que tiene marcada su apuesta por el salir jugando desde la zona defensiva, la cual le cobró factura en su visita contra Puebla. 

Un par de minutos después de la anotación de Giorgos Giakoumakis contra la Franja, el conjunto cementero trató de dominar la pelota para que concluyera la primera mitad; sin embargo, Gonzalo Piovi se equivocó en la salida al intentar apoyarse en Willer Ditta, regalando la pelota a la ofensiva camotera. 

Luis Quiñones aprovechó la desatención del defensor argentino, se acomodó y sacó un poderoso zurdazo que fue desviado y que terminó incrustándose en la portería defendida por Kevin Mier. 

Piovi se dio cuenta de inmediato de la gravedad de su error en la salida, por lo que inclusive se quedó unos segundos tirado en el terreno de juego, con la frente en el césped, por lo que sus compañeros le dieron ánimos para continuar en la partida. 

Curiosamente, el sudamericano había sido fundamental para la anotación celeste, ya que fue el encargado de ganar la pelota por arriba para habilitar a Giakoumakis que solo tuvo que empujar la pelota al fondo de las redes.