En el Clausura 2024 se creó un clima increíble alrededor de un Cruz Azul que volvió a ser protagonista de la Liga MX después de varios años estando en el sótano. Con Iván Alonso encabezando el proyecto y con Martín Anselmi en la dirección técnica, la afición volvió a confiar en el equipo y generó una conexión especial con la plantilla. Estas fueron cuestiones que ayudaron mucho para que el club llegara a la final del torneo.

Sin embargo, como sucede en cada temporada, la final terminó siendo definida por una polémica arbitral a favor del América. Cuando Rodolfo Rotondi decidió barrer dentro de su área, Israel Reyes se desplomó y Marco Antonio Ortíz decidió marcar penal. A pesar de que todavía no hay una imagen clara que muestre al lateral argentino golpeando al jugador americanista, el Gato siempre mantuvo su decisión.

Está claro que todo este contexto despertó una de las controversias más grandes de los últimos campeonatos debido a que el partido estaba demasiado igualado. Más allá de que La Máquina pasó página y se reforzó para coronarse en el Apertura 2024, la polémica volvió a hacer presencia en redes sociales. Lo que sucedió es que en el juego entre Tigres y Atlas por la segunda jornada, no se cobró como penal una jugada idéntica a la de Rotondi.

Al igual que sucedió en la final, es el delantero quien desea provocar el contacto para engañar al árbitro y así marque la sentencia máxima. Incluso semanas después de lo sucedido, el propio Reyes confesó que le puso colmillo a la acción para engañar al silbante. Algo que está claro es que pasarán los años y será tenido en cuenta por la magnitud de la cuestión.

Gato Ortíz habló sobre el penal pitado en la final entre Cruz Azul y América

Más allá de que fue muy criticado por cómo dirigió el partido, el Gato Ortíz hizo referencia al penal que marcó: “Es que al final, desde luego es polémica, claro que es penal, si alguien basado en reglas de juego analiza la jugada, evidentemente vamos a llegar a una conclusión, pero para especialistas del tema no existe polémicaRealmente cuando llego al monitor (VAR), ratifico la decisión basado en las reglas de juego que marca la FIFA“.

Por supuesto, esta respuesta soberbia despertó aún más el enojo de la afición cementera que tiene muchas razones para pensar que le robaron una final. La principal tiene que ver con el bono extra que Emilio Azcárraga, dueño del América, le dio por haber estado en la final.