Los rumores corrían fuerte: fuentes cercanas a la Federación Mexicana de Futbol aseguraban en horas de la mañana del viernes que Ignacio Rivero sería sancionado por dos a tres partidos de suspensión, por la falta sobre Alexis Vega, en el amistoso entre Cruz Azul y la Selección de México Sub-23 el pasado domingo.

Sin embargo, durante la tarde de ayer, la FMF anunció la resolución de la Comisión Disciplinaria, luego de escuchar los testimonios de ambos jugadores, la entrega de pruebas por parte de Chivas y de la Máquina, quienes buscaban culpar y absolver (respectivamente) al volante uruguayo.

 

Y el jugador fue liberado. La Femexfut determinó declarar improcedente la solicitud de inhabilitación que hicieron desde el Guadalajara, y Cruz Azul no perdería a Rivero para la Liguilla, por lo que podría estar disponible para los venideros cuartos de final.

¿Cuáles fueron las razones que terminaron con el uruguayo sin castigo?

Según reveló FMF, fueron tres:

1. No se observó actitud particularmente violenta.

2. El jugador mostró intensidad competitiva.

3. La intención de Rivero no era lastimar a su adversario.

Récord confirmó que Gerardo Torrado, director general de Selecciones, llamó a Ricardo Peláez para aclararle todo lo que ocurrió, pedirle disculpas por la mala comunicación que hubo entre ambos clubes por el caso de Alexis Vega, y explicar por qué, finalmente, no sancionaron a Rivero.