Cruz Azul dejó el estadio Azul el 21 de abril de 2018. Considerando que ese día disputó su último partido como local en la fase regular del torneo de Clausura y que no había calificado a la Liguilla, la Máquina se despidió del recinto deportivo que le recibió por 22 años y que, a la postre, se convirtiera en su casa.

A partir de ese momento la Máquina inició una relación indefinida con el estadio Azteca: si bien a mediados de 2018 se extendería por tres años, siempre se supo que eran prolongables por más tiempo y que incluso Cruz Azul podría quedarse ahí para siempre, pese a que las intenciones de la directiva eran construir un nuevo coloso deportivo.

Cruz Azul se despidió del estadio Azul el pasado 21 de abril de 2018. (Foto: Jam Media)

Cruz Azul se despidió del estadio Azul el pasado 21 de abril de 2018. (Foto: Jam Media)

Y con eso en mente, la alta cúpula cementera nunca ha dejado de buscar algún terreno por si aparece el lugar idóneo para edificar un nuevo estadio para Cruz Azul, incluso fuera de la Ciudad de México, pero en delegaciones cercanas en el Edomex, para no alejarse tanto de lo que siempre han querido.

¿Cuál es el valor de un nuevo estadio? Considerando que el terreno puede tener un precio no calculable de buenas a primeras, no será considerado para estos efectos, pero hay que tener en cuenta que a Rayados y a Chivas les costaron alrededor de 200 millones de dólares sus estadios y a Santos Laguna le costó 100 MDD. Toluca, en tanto, remodeló de pies a cabeza el suyo por 80 MDD.

En promedio, Cruz Azul pagaba 10,5 millones de pesos anuales por concepto de renta a la Inmobiliaria la Ribera: entre 2015 y 2019 pagó 42,6 millones por el alquiler del estadio Azul. Esto equivale a 190 millones de dólares, aproximadamente. Por lo que con el alquiler de cinco años del coloso de la colonia Nochebuena, la Máquina pudo constuirse uno propio. Lamentable.