A las noticias que surgieron este miércoles que revelaban cómo Cruz Azul había sido beneficiado con un perdonazo del Servicio de Administración Tributaria por no pago de impuestos, por alrededor de 360 millones de pesos,entre 2007 y 2015, se sumaron las noticias del posible lavado de dinero y maximización de ganancias por cada derrota que tiene la Máquina.
Tal como leen. Según reveló el medio Eje Central, las autoridades están investigando todo respecto a una reaseguradora que constituyeron Guillermo y Alfredo Álvarez Cuevas, junto con Víctor Garcés, en las Islas Caimán, que son consideradas como paraíso fiscal, y donde aseguraron los activos más importantes de la Cementera y delClub Deportivo Cruz Azul el 30 de noviembre en 1992.
El medio, además, añade que la investigación también buscaría operaciones de evasión de impuestos y una denuncia hecha en la ex Procuraduría General de la República en 2010,en que se asegura que“con la contratación de seguro y reaseguro para la Cooperativa La Cruz se facturaba a sobreprecio, lo que representaría mayores ganancias para los hermanos Álvarez Cuevas y sus socios”.
El SAT no quiso revelar si sancionó a los empresarios, en este caso la familia Álvarez, acusando secreto fiscal, pero fueron 342 millones los que perdonaron a Cruz Azul FC y a la Cooperativa. Eso no es todo, ya que el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Santiago Nieto, que están revisando posible lavado de dinero entre promotores y clubes de fútbol.
Eje Central además denuncia que la directiva de Cruz Azul se ha beneficiado por cada “desgracia deportiva”, ya que aseguran que“si Cruz Azul era campeón, la reaseguradora Blue Eagle Re debía pagar un millón de dólares al equipo. Pero si no alzaba la copa, la póliza de 40 millones de dólares que pagaba la Cooperativa al año, quedaba en la propia compañía creada por los hermanos Álvarez y Víctor Garcés en las islas caribeñas”.
El SAT aclara, sin embargo, que “el hecho de tener recursos en el extranjero no constituye un delito por sí mismo, lo ilegal es que esas inversiones tengan una utilidad y que ésta no sea declarada en México con el propósito de evadir el pago de impuestos”.
Fue en 2008 cuando la reaseguradora Blue Eagle Re se disolvió, pero en los 16 años que funcionó, no pagaron impuestos por ella en México. Y en 2017 quedó en evidencia la maquinaria que utilizó Cruz Azul para evadir impuestos incluso en las derrotas, gracias a la firma de abogados offshore Appleby.
Ejecentralreveló que “solicitó al SATque informara, vía transparencia, si los directivos de la Cooperativa La Cruz Azul habían sido investigados a partir de las pesquisasde Panama Papers, Bahama Leaks y Paradise Papers; sin embargo, el órgano del Estado mexicano determinó la información como confidencial”.
La Cooperativa Cruz Azul contrató a una reaseguradora extranjera, Glacier Reinsurance, en la que entregaron al activo más importante: el club de fútbol. Una póliza emitida al 100% a nombre del equipo, cubría dos torneos por año, Apertura y Clausura de Liga MX. Si conseguían cierta cantidad de puntos, recibían entre uno y dos millones de dólares, pero si superaban ese puntaje o eran campeones, recibían un millón más.
Blue Eagle Re -la reaseguradora que constituyó la directiva de Cruz Azul en las Islas Caimán- debía entregarle esos beneficios que pactaban con Glacier Reinsurance, y como nunca se les notificó a los cooperativistas, no es seguro si entregaron el dinero.
Sin embargo, el costo que cubría a la Cooperativa, a ciertos trabajadores, y al club de futbol era de 40 millones de dólares. Pero como la reaseguradora que contrató a Glacier Reinsurance era propiedad de los Álvarez Cuevas en una sociedad offshore en las Islas Caimán, ya ganaban 40 millones de dólares que les devolvía el seguro en caso de defunción de esos cooperativistas o de que la Máquina perdiera alguna final.
Fue en 2010 cuando los cooperativistas descubrieron esta sociedad offshore y la denunciaron, pero llegaron tarde ya que fue disuelta en 2008.En julio de 2010, José Alfredo Álvarez Cuevas, hermano de Billy, negó haber participado en esos hechos. “Manifiesto que tuve conocimiento de ellos, al igual que muchos de mis compañeros socios cooperativistas de la Cooperativa La Cruz Azul, S.C.L., el día 30 de septiembre de 2009, fecha en la que se presentó el señor Carlos Javier Terroba Wolff para explicar las operaciones en las que se había participado en unión de otras personas y que son aquellas que han referido precisamente, por cierto, los medios de comunicación”, señaló. Terroba era miembro de la sociedad pero luego de la disolución, reveló TODO.
No hay información de si los cooperativistas denunciarán, si el SAT investigará y castigará y si los directivos de Cruz Azul revelarán más detalles al respecto.
