La salida de Uriel Antuna a Tigres despertó un debate muy intenso alrededor de la plantilla de Cruz Azul. Es verdad que Iván Alonso realizó un gran trabajo para cerrar contrataciones de mucha jerarquía, pero también se produjeron bajas sensibles. Entonces, aunque se realizaron fichajes muy interesantes, el plantel no terminó de extenderse como se pretendía en un principio.
Más allá de que Martín Anselmi explicó que le gusta trabajar con un grupo de jugadores reducido, lo cierto es que actualmente está afectando a La Máquina. Sobre todo porque no solo se apuesta a que no existan lesiones o suspensiones, sino a que también esas piezas mantengan una regularidad. Hay casos como el de Luis Romo que ha tenido un rendimiento muy alto desde su llegada, pero hay otros que no han logrado estar a la altura.
La realidad es que Andrés Montaño está muy lejos de las expectativas que había generado en la previa a su arribo a La Noria. A pesar de que Anselmi lo probó en varias posiciones, todavía no le ha encontrado al sitio para que el volante muestre su mejor versión. Mientras que frente a Atlético San Luis jugó al lado de Ángel Sepúlveda, en la Leagues Cup había ocupado un rol casi de extremo por izquierda.
Está claro que el mediocampista de 22 años tiene cualidades con el balón muy buenas, pero todavía no las ha podido aprovechar con la playera de Cruz Azul. Por supuesto, es joven y lleva un puñado de partidos con la institución, por lo que hay confianza en que podrá revertir esta situación. Sin embargo, el rendimiento mostrado hasta el momento en la Liga MX genera que no sea tan bien considerado por Anselmi.
Andrés Montaño llegó con lo justo al último partido de Cruz Azul
Para ser justos con Montaño hay que aclarar que durante la última semana ha sufrido un fuerte estado febril. De hecho, esta situación le impidió estar disponible para el juego frente a León, pero no pudo evitar tomar la posibilidad de ser titular contra San Luis. Por ende, está claro que el joven mexicano tampoco se encontró en óptimas condiciones cuando saltó al campo de juego.
Algo que también marca lo especial que es Montaño tiene que ver con su última convocatoria a la Selección Mexicana Sub-23. Aunque no está teniendo protagonismo en el cuadro cementero, desde el Tri creen que tiene mucha proyección por sus características. Será trabajo de Anselmi no solo ayudarlo a recuperar confianza, sino también a encontrarle su rol dentro de su sistema.