Hace varios años que los duelos entre Cruz Azul y Chivas se volvieron muy especiales por lo que generó el intercambio de Roberto Alvarado por Uriel Antuna. Si bien el Brujo decidió dejar la institución en este mercado, el Piojo firmó una extensión de contrato con el cuadro de Guadalajara. Además, será la primera vez que el extremo de 25 años jugará en el Estadio Azul ante el público cementero.

Está claro que Alvarado es un futbolista muy querido por la nación celeste por la importancia que tuvo en la obtención de la Novena. Se espera que haya una oleada de aplausos cuando sea presentado el sábado por la noche en el Azul. Sin embargo, una vez que el árbitro pite el inicio del partido, todos estarán focalizados en que La Máquina sume una nueva victoria en el Apertura 2024.

La realidad es que el Piojo es el mejor jugador del Chivas de Fernando Gago porque es el que maneja todos los hilos del ataque. No solo se trata de una pieza ofensiva que aparece como una constante amenaza a la defensa rival, sino que también participa y mucho del circuito de juego. Lo curioso es que Alvarado tiene una fuerte maldición enfrentando a Cruz Azul: nunca pudo marcarle.

Algo que ayudaría al Piojo a terminar con esta mala racha es que se convirtió en el cobrador oficial de penales del Rebaño Sagrado. Por lo tanto, en caso de que exista una pena máxima a su favor, será el ex cementero quien deba enfrentarse a Kevin Mier desde los 12 pasos. Lo positivo para Cruz Azul es que Fernando Gago no podrá contar con Cade Cowell, uno de los mejores socios de Alvarado.

Piojo Alvarado nunca quiso irse de Cruz Azul

El intercambio que se realizó por el Piojo fue muy cuestionado debido a que Antuna venía de tener muchos problemas de indisciplina. Al mismo tiempo, Alvarado era un símbolo increíble de Cruz Azul, pero la directiva llevó a cabo la operación. Hace unos meses, el actual jugador de Chivas contó que nunca quiso dejar La Noria: “En un principio la verdad es que no quería salir. Estaba a gusto, tenía 4 años allí y me había ido bien. Pero justo pasó que hablaron conmigo y me dijeron que me iba a ir mejor allá (en Chivas) económicamente y que era un cambio que me iba a hacer bien”.

“Entonces cuando me dicen eso es como que ya no están considerándome. Ahí sí hablé con mi representante y le dije ‘pues me dijeron esto así que pues hay que acelerar para ir para allá’. Después platiqué con mi esposa y decidimos que un cambio también nos iría bien y al final”, sentenció el delantero de la Selección Mexicana.