Después de cinco años y medio, Cruz Azul regresó al ex Estadio Azul, escenario que fue casa de La Máquina durante 22 años (de 1996 al 2018). Y la vuelta al coloso de la colonia Noche Buena fue espectacular, el inmueble -conforme a las normas de seguridad- registró un llegó total.
El aliento de la afición cementera fue majestuoso. Sin embargo, en el estadio no se escuchó el emblemático sonido de La Máquina, que acompañó al equipo celeste durante muchísimas tardes. La ausencia fue destacada durante la transmisión de televisión, pero la duda no quedó resuelta.
¿Por qué no escuchó el emblemático sonido de La Máquina en el Estadio Azul? La razón es porque don Gabino Gutiérrez, el legendario personaje que hacía posible aquel mágico momento, falleció en diciembre del 2020.
ver también
¿Quedarse en el Estadio Azul? “Cruz Azul merece uno de los mejores estadios de México”
La forma de animar de don Gabino nunca pasó desapercibida. Cargaba siempre 12 bocinas y un par de baterías de auto; luego, tras oprimir un botón, todos los accesorios simulaban el sonido atronador de una locomotora a toda marcha que retumbaba en cada rincón del estadio.
Cruz Azul regresó al ex Estadio Azul.
Don Gabino se llevó el mágico sonido
El miércoles 2 de diciembre falleció don Gabino Gutiérrez, aficionado de La Máquina conocido como ‘El Fogonero’, por ser el ejecutor del sonido de la locomotora que tronaba en los encuentros que Cruz Azul disputaba como local en el Estadio Azul.
Por más de dos décadas, don Gabino, miembro de la Porra Cruz Azul de 1971 -grupo de animación familiar de la afición de los celestes-, fue el encargado de ‘hacer el ambiente’ en los graderíos.
ver también
Redes sociales: El exótico y candente apodo de Ángel Sepúlveda, goleador de Cruz Azul
La espectacular reacción de la afición de Cruz Azul
Una fiesta se vivió en el ahora llamado Estadio Ciudad de los Deportes durante el duelo que Cruz Azul disputó ante Pachuca. En todo momento, la afición celeste apoyó al equipo, destacando la espectacular reacción de los seguidores de La Máquina tras el gol del conjunto hidalguense.
Tras el gol del delantero venezolano Salomón Rondón, la afición celeste guardó silencio unos segundos, pero después… ¡alentó al equipo de manera brutal! “Yo, soy celeste, es un sentimiento, que no morirá…”, retumbó en las gradas del ex Estadio Azul.
