Este sábado 4 de julio, Cruz Azul rompió con más de 110 días sin futbol cuando saltó a la cancha del estadio Olímpico Universitario para enfrentar a los Pumas de la UNAM, en un juego válido por la jornada 1 del grupo A de la Copa por México, el nuevo torneo de pretemporada en México.
El certamen, que se disputa a la par en CDMX y en Guadalajara (con Chivas, Atlas, Tigres UANL y Mazatlán FC), será la primera prueba de los protocolos sanitarios que puso Liga MX y la Federación Mexicana de Futbol, en conjunto con las autoridades de salud, para lo que será el torneo de Apertura 2020.
En el caso de Cruz Azul, por ejemplo, sus jugadores llegaron en dos camiones distintos, cada uno sentado en un asiento distinto del autobús, con distancia, con tapabocas hasta el momento de entrar a la cancha y sin toparse con los rivales.
Pumas, en tanto, arribó al estadio Olímpico Universitario 20 minutos después, para asegurarse que los jugadores ya habían salido de los accesos y que no se toparían con gente por seguridad.
Ya en la cancha el cuerpo técnico está dirigiendo con tapabocas, los jugadores suplentes están sentados en las tribunas y manteniendo distancia con sus compañeros, como parte de las medidas de seguridad que impusieron.