Sergio Bueno es consciente de que su etapa en el banquillo de Cruz Azul es un lunar en su carrera como entrenador. Con apenas 10 encuentros dirigidos en el Apertura 2015, la directiva celeste, en común acuerdo con el estratega, rescindieron el contrato que los unía por un año y siguieron caminos distintos.
En un principio se habló de que el motivo por el cual se dio su salida repentina fueron los malos resultados: en esos 10 encuentros dirigidos, dejó un saldo de tres victorias, un empate y seis derrotas. Tiempo después se supo que la presión de la afición también influyó en el cese del entrenador en el cargo.
Ahora es Rafael Baca el que ha dado más razones sobre el despido de Bueno. En una entrevista para ESPN, el mediocampista de La Máquina confesó que el trato del entrenador no era bueno con los jugadores, y que eso también habría influido en la decisión final de despedirlo apenas disputados 10 partidos.
“De hecho si no me equivoco hubo una pretemporada en Estados Unidos donde se ganó un trofeo, a mí no me tocó ir porque era cuando estaba castigado por el tema de mi visa, pero le fue muy biena Sergio Bueno cuando llegó a Cruz Azul, después en el torneo le fue más o menos y lo terminaron echando. Pero fue ese tema de la comunicación hacia el jugador.”, comentó Baca.
Tras su salida del club cementero, Bueno se descargó en una entrevista posterior y afirmó que hizo lo mejor que pudo mientras dirigió a Cruz Azul. “No me hace mella para nada ni me incomoda lo que digan, porque sé quién soy, sé lo que he hecho, sé de dónde surgí y a dónde he podido llegar. Estoy más que contento con mi carrera, aunque seguramente no satisfecho del todo, porque siempre tiene uno aspiraciones de llegar más lejos”, dijo.
