Uno de los grandes problemas que ha tenido Cruz Azul en los últimos años es que sus fuerzas básicas quedaron olvidadas. Desde la venta de Santiago Giménez se produjeron muchos debuts, pero prácticamente ninguno tuvo oportunidades reales con el primer equipo. La única excepción a esta regla es Rodrigo Huescas, quien es una de las grandes joyas de la Liga MX.
La realidad es que el carrilero de 20 años se ganó un lugar en primera con Ricardo Ferretti y demostró tener cualidades muy interesantes. Incluso se especula con que Jaime Lozano podría darle una oportunidad para la Copa América 2024. Sin embargo, recientemente se reveló que Huescas no renovará su contrato con ‘La Máquina’; el mismo tiene vigencia hasta diciembre del 2025.
Ante este panorama, Adrián Esparza Oteo reveló la cronología de las negociaciones de su renovación: “Hay versiones encontradas de ambos lados. Llevan meses y meses tratando de renovar; creo que fue en octubre o noviembre que mencioné que estaban a nada de renovar porque la verdad que así era. Es una negociación que arrancó no con Iván Alonso, sino con la administración pasada, con el Conejo Pérez“.
“Luego de eso se pausan las negociaciones y en diciembre o enero se retoman con Iván Alonso. Lo cierto es que nunca pudieron llegar a un acuerdo; siempre moviéndose las cifras, siempre moviéndose lo que uno pide y lo que otro exige. Lo que yo tengo entendido es que uno de los temas puntuales siempre fue la cláusula de rescisión“, comentó el periodista en ‘El Podcast de la Máquina’.
La cláusula de rescisión que Cruz Azul le quiso imponer a Rodrigo Huescas
Lo concreto es que actualmente sucede en el mundo del futbol que muchos jóvenes terminan saliendo gratis o por muy poco dinero debido a que no se encontraban blindados. En esta ocasión, Cruz Azul quería asegurarse una buena cantidad de dinero por Rodrigo Huescas; es por eso que pretendía una cláusula de salida de 10 millones de dólares. Sin embargo, el futbolista habría rechazado esta propuesta al tratarse de mucho dinero.
El pase del carrilero está valuado en 5 millones de dólares, aunque al conjunto cementero le habría llegado una oferta cercana a los 3 millones. Está claro que no es un dinero razonable considerando el potencial de Huescas, por lo que no sería considerada. Debido a que el club no tiene demasiado poder de negociación, el plan es mantener un porcentaje de la ficha del futbolista para una futura venta al igual que se hizo con Santiago Giménez.