En el fútbol mexicano, donde la pasión y la expectativa se viven al máximo, pocas cosas generan tanto debate como la formación de jóvenes talentos. Cruz Azul no es ajeno y también enfrenta un dilema que trasciende lo deportivo: cómo dar lugar a las nuevas generaciones en un mercado saturado de fichajes por estrellas mundiales y promesas a medias.
Hace algunas semanas, el reconocido periodistaJavier Alarcón señalaba la dificultad que enfrentan los canteranos celestes para ganarse un espacio en el primer equipo. Un panorama que hoy encuentra un eco inquietante en las palabras de Marco Fabián, ex jugador de Cruz Azul y voz autorizada en la Liga MX.

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En una entrevista con David Faitelson, no dudó en señalar que el problema del poco surgimiento de jóvenes talentos mexicanos no radica en la falta de calidad, sino en la falla del proceso que les permita desarrollarse correctamente. “Antes los clubes importantes daban mayor prioridad a las fuerzas básicas, creando generaciones brillantes. Hoy, ese proceso está trabado y sólo emergen dos o tres jugadores, cuando deberían ser miles”, afirmó Fabián.
Este diagnóstico va en línea con lo expresado por Alarcón, quien advertía que la llegada de refuerzos como José Paradela o Jeremy Márquez, aunque necesaria, puede eclipsar el crecimiento de los jóvenes formados en La Noria, dejando a muchos en la incertidumbre o estancados en la banca: “bloquean espacios automáticamente para ciertos jugadores jóvenes“.
La tensión entre apostar por talentos propios o traer figuras externas pone a Cruz Azul y a la Liga MX en una encrucijada. El debate sobre el futuro de las fuerzas básicas impacta a todo el ecosistema del fútbol mexicano y la pregunta crucial está servida: ¿Estamos perdiendo a las nuevas generaciones por falta de oportunidades y visión estratégica?
Las grandes joyas que Cruz Azul ha formado en los últimos años
Cruz Azul ha dado algunos valores como fruto del trabajo con sus fuerzas básicas. Casos como los de Mateo Levy y Amaury Morales, quienes comenzaron a tener minutos en el primer equipo, despiertan ilusión en la afición celeste. Pero los ejemplos más resonantes son los de Rodrigo Huescas y Santiago Giménez, dos productos formados en La Noria que hoy brillan en el fútbol europeo.