Sergio Markarián llegó a Cruz Azul para la temporada 2007. El entrenador uruguayo fue considerado como un innovador por su estilo de juego atrevido y un carácter indomable. Los segundo lo dejó claro cuando prescindió de algunos futbolistas considerados como ‘intocables’ para la crítica especializada y gran parte de los fanáticos. Aún y así, el estratega siempre fue celebrado en el futbol mexicano.
En una conversación exclusiva con Canal 6, el director técnico charrúa hizo un repaso de su paso por La Máquina y dejó varias ‘perlas’. En concreto, Markarián reconoció la razón principal por la cual no ganó un título de Liga MX como cementero. Es más, detalló al responsable principal de su paso en falso en el campeonato local.
“Así fue como se armó ese equipo del segundo semestre, que llegó conmigo a una Final, que la perdimos sin duda porque el rival tenía a un jugador increíble, Chucho Benítez, él nos ganó. Pero Cruz Azul había mostrado una cosa distinta, había transmitido al futbol mexicano una actitud diferente.”, reconoció el técnico, quien llegó a su primera final en su segunda campaña al frente del equipo.
Markarían también explicó que le hubiera gustado quedarse en Cruz Azul a pesar de que tuvo encontronazos con la directiva de ese entonces. “Ese equipo que llegó a la Final, después de que yo me fui, volvió a llegar a otra Final, hicimos un buen trabajo. Me hubiera gustado quedarme, renovar, estar un tiempo más, buscar lo que yo proponía, que era el título el año siguiente y por qué no, ser campeón del mundo, porque Cruz Azul merece jugar la Concachampions, ganarla y pelear por ser el mejor del mundo“, puntualizó.
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Crítica al futbol mexicano
El que fuera también entrenador del seleccionado peruano hizo una crítica severa al futbol mexicano. Según sus propias palabras, en México se pondera más el tema económico al deportivo, algo que termina afectando en el plano internacional y al desarrollo de nuevos futbolistas surgidos en el patio local.
“Yo veía a un futbol mexicano muy volcado a los números, al resultado económico, y poco volcado al éxito deportivo a nivel internacional. Más valía tener un buen balance que una buena copa. Cuando tienes tamaña cantidad de extranjeros es difícil que los jóvenes tengan un lugar, no hay manera de que un joven se consolide en primera si hay alguien con nombre y trayectoria delante de él”, aseguró.