¿Qué parámetros son la medida para que Cruz Azul salga al mercado por un jugador? La pregunta pareciera odiosa, pero viendo el rendimiento y las actitudes de algunos de losúltimos fichajes de La Máquina, resulta curioso lavara con quese midea los futbolistas para que lleguen a La Noria.
Haciendo un recuento pormenorizado, Jonathan Borja salió del equipo tras un año decepcionante lastrado por sus malas actitudes fuera del césped y en los entrenamientos. Su caso tiene tintes similares a lo que ahora sucede con Lucas Passerini, quien pasó a las filas del Atlético San Luis por un problema de actitud. Los dos llegaron a comienzos de este año.
Así lo describe el periodista David Medrano en su columna en el diario Récord. Según las palabras del comunicador,“hubo algunas actitudes del argentino que no gustaron al cuerpo técnico y a los dirigentes“. Esto, sumado a su poco aporte ofensivo, en donde solo vio puerta en tres ocasiones durante el Guard1anes, pusieron fin a su etapa con Los Rayos.
Desde Cruz Azul miran con escepticismo el futuro del delantero argentino, en quien ¿aún? se tienen muchas esperanzas depositadas de cara a los próximos torneos. Su cesión, en principio, es por un año, los primeros seis meses los pasó con Los Rayos, y esta segunda etapa la vivirá con los rojiblancos.
Sin embargo, desde La Noria se han querido ‘guardar las espaldas’ y ya han puesto un precio para dar luz verde a la salida del jugador: tres millones de dólares. Con la mala experiencia con Borja, un Pablo Ceppelini ausente, y con Walter Montoya y Pol Fernández en un limbo, Cruz Azul también queda eliminado en el torneo de los mejores compradores.