Por más que tenga las ganas de querer ser un aporte para el actual momento de Cruz Azul, lo concreto es que Gerardo Flores no se siente en buenas condiciones y no sabe hasta cuándo podrá estar ausente.

Así lo reconoció en la llegada de La Máquina desde Ixtapa, donde realizó la pasada semana su intertemporada, donde el Jerry confesó que "tengo una molestia en la rodilla que es lo que no me ha dejado entrenar al parejo y por eso no tengo una fecha; espero y sueño estar lo más pronto posible y ayudar al equipo".

Además, agregó que "hemos tenido algunas complicaciones, sigo hablando con los doctores y seguimos la rehabilitación para estar lo más rápido posible".

Respecto de cómo fueron los trabajos en el Estado de Guerrero, Flores comentó que "se trabajó en lo físico, en lo táctico, igualmente tuvimos un coaching, tratamos de aprovechar lo más que se puedan estas cuestiones, alejarse un poco de la Ciudad, lo que quiere el equipo es mantener esa intensidad y ese juego que ha venido mostrando ahora".