La situación de Santiago Giménez en el AC Milan se ha vuelto cada vez más tensa. Su primer año en la Serie A no ha estado a la altura de las expectativas y la falta de gol lo ha dejado expuesto ante una directiva que ya evalúa alternativas. El club esperaba que fuera una solución inmediata en ataque, pero su adaptación está lejos de lo ideal.
En este contexto, surgieron versiones desde Inglaterra e Italia que lo colocan en el radar del West Ham. El equipo londinense estaría dispuesto a contemplarlo dentro de un movimiento de intercambio entre ambas instituciones. La operación se perfila como una posibilidad real para el mercado de 2026.
El paso del Bebote por el rossonero no ha terminado de convencer pese a que Massimiliano Allegri lo mantuvo como su delantero titular en esta primera etapa. El atacante mexicano no registra ni goles ni asistencias en los nueve partidos que ha disputado en la liga, un dato que aceleró la preocupación.

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A partir de esa sequía, desde Marca y AS sostienen que los Hammers podrían ofrecer a Niclas Füllkrug como parte de un trueque. La idea sería que ambos clubes roten piezas en ataque buscando variantes urgentes. En el caso del Milan, se trataría de reactivar un frente ofensivo que ha quedado corto en soluciones.
Los informes señalan que el mayor interesado en destrabar el intercambio sería el conjunto italiano. En Milán creen que un cambio de perfil en el centro del ataque podría dar respuesta a los problemas que el equipo arrastra desde principios de temporada, especialmente en la producción goleadora.
El presente y la temporada de Giménez
Desde que llegó al club en febrero de 2025, al Bebote le ha costado encontrar continuidad en su rendimiento. Aunque ha tenido minutos y espacio para mostrarse, no ha logrado consolidar una relación positiva con la grada, que ya comienza a expresar cierta impaciencia ante su bajo aporte ofensivo.

Santi podría salir en breve del Milan (Getty).
En total, el ex Cruz Azul suma 30 partidos en el año, con 1664 minutos, 7 goles y 4 asistencias, números que se vieron interrumpidos por una reciente lesión de tobillo que lo obligó a pasar por el quirófano y detener su ritmo al menos por un mes. Su último festejo se remonta al 23 de septiembre ante Lecce, por la Copa Italiana.





