En la previa al inicio de la ida en el Estadio Azul había mucha expectativa por la final del Clausura 2024. Cruz Azul y América fueron los mejores equipos de la liguilla y llegaron a esta instancia superando a sus anteriores rivales. Por lo tanto, se esperaba ver un juego muy interesante en la noche del jueves.
La realidad es que el partido terminó 1 a 1 y el rendimiento de ninguno de los dos equipos fue el esperado. Si bien es cierto que el primer tiempo fue interesante, en el segundo se tomaron muchos más recaudos a la hora de atacar y defender. El que más énfasis hizo en esta cuestión fue el América, quien se desentendió de la posesión del balón y se encargó de aguantar el empate.
Ante este panorama, Gonzalo Piovi criticó su postura: “Estos partidos no son fáciles pero creo que en líneas generales fuimos superiores al rival. Ellos vinieron a defenderse, tratar de salir de contra en nuestra cancha; pero bueno, creo que hicimos un buen partido y esperamos cerrarlo de la mejor manera el domingo”.
A pesar de que las ‘Águilas’ tienen individualidades increíbles para lastimar a Cruz Azul, André Jardine decidió ser más conservador en el Ciudad de los Deportes. Este estilo ha sido muy criticado por parte de la afición azulcrema durante toda la temporada aunque evidentemente le ha dado resultados positivos. El domingo en el Estadio Azteca se verá nuevamente este choque de ideologías y solamente una podrá coronarse con el título de Liga MX.
¿Por qué Gonzalo Piovi utiliza el dorsal 33 en Cruz Azul?
Algo curioso que se ha dado durante la temporada de Cruz Azul es que la afición tomó el número 33 como un amuleto. Se cree que esta cifra trae buena suerte debido a que aparece en aspectos positivos alrededor de la institución. El número ha estado presente a lo largo de todo el Clausura 2024, incluso en la final con el gol de Julián Quiñones, quien utiliza ese dorsal.
En ‘La Máquina’ es Gonzalo Piovi quien lo utiliza y explicó por qué lo eligió: “Primero, porque lo eligió mi hija y, segundo, porque es el número de Cristo y eso es algo en lo que me siento reflejado al ser creyente. Y después porque me han pasado cosas en mi vida que me llevaron a poder confiar y tenerlo presente“.