Julio Zamora se convirtió en una de las máximas figuras de Cruz Azul en la década de los noventa. La afición cruzazulina recuerda de gran manera al delantero argentino, quien de 1993 a 1996 brilló con la Máquina y se convirtió en el socio perfecto de Carlos Hermosillo, el máximo goleador en la historia del club cementero.

Tal fue la intensidad en la relación entre el Negro Zamora y Cruz Azul, que el histórico jugador argentino rechazó a más de un equipo de la liga mexicana. Primero fue al América y después a los Tigres, escuadra que lo buscó cuando terminó su relación laboral con el equipo celeste, luego de que no entrara en los planes de Víctor Manuel Vucetich.

“En ese momento me vineron a buscar los Tigres de Monterrey que estaban en Segunda, pero a mí me resultaba difícil irme a otro club de México que no fuera Cruz Azul. No sentía la forma de irme a otro club, no iba a sentir lo mismo que yo sentía en Cruz Azul, viví casi cuatro años maravillosos en Cruz Azul. Todos en la institución me trataron de maravilla”, dijo Julio Zamora en entrevista para MX Sudamericana.

Además, el Negro Zamora volvió a recordar cuando le dijo que no al acérrimo de las Máquina: “En el 94 América me buscó, me ofrecieron un contrato tres veces más de lo que yo ganaba en Cruz Azul, pero en ese momento les dije que no. No podía tracionar a Cruz Azul. Inmediatamente se lo conté a Billy Álvarez y se armó una Revolución porque lo hizo público”.

Por otra parte, Julio Zamora rememoró que por casualidad llegó a Cruz Azul, pues apuntó que Enrique Meza tenía en la mira a Claudio García, pero justo en el entrenamiento de la Selección Argentina dirigida por el Coco Basile donde harían la visoría del delantero argentino, destacó la figura del Negro, quien se robó los reflectores tras marcar cuatro goles, primero dos con los suplentes y luego un par con los titulares.

Tras esa brillante actuación, la Máquina cambió de candidato: se olvidó de García y apuntó hacia Zamora, que semanas después de ese notable entrenamiento de finales de 1992 se convirtió en jugador de Cruz Azul.

El caprichoso destino siempre lo ubicó en Cruz Azul

Julio Zamora reveló que estuvo a un paso de llegar a los Tigres, tres años antes de que se convirtiera en jugador de Cruz Azul. El Negro recordó que en 1990, cuando Carlos Reinoso era técnico de los felinos, “tenía todo arreglado con Tigres”, pero una semana previa a viajar a México sufrió una fractura de tobillo, lo que echó por tierra el convenio entre el argentino y el conjunto universitario.

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